Cuando los indios americanos pudieron abrir casinos en sus territorios, muchas tribus se beneficiaron del rentable negocio. Las ganancias mejoraron su situación económica y su esfera social. Enviaron a sus hijos a buenas escuelas y abrieron nuevos hospitales.
Al mismo tiempo, esta actividad no podía causar descontento entre los habitantes indígenas del continente y las autoridades de los diversos estados competidores en el negocio del juego. Además, hubo críticas al juego de los indios por parte de personalidades públicas y culturales que veían en ello una amenaza para muchos nativos americanos.
Vamos a averiguar si los casinos de las comunidades indias son buenos o malos. Sopesaremos sus "pros" y sus "contras".
Pros de los casinos para nativos americanos
Hablemos primero de los pros.
- Los beneficios. Por supuesto, el principal pro del juego tribal es un sólido beneficio. En total, son ya decenas de miles de millones de dólares al año. El dinero debe destinarse a la educación y a sectores sociales y caritativos. Así, se utiliza para financiar escuelas, hospitales, policía y otros organismos comunitarios.
- Empleo. Los casinos emplean a muchos indios como crupieres, jefes de foso, guardias de seguridad, camareros, etc. El juego estimula el desarrollo de otras industrias en las que también se necesitan empleados.
- Orgullo nacional y desarrollo cultural. Las encuestas de opinión muestran que el desarrollo de casinos en las reservas indias hace que la gente se sienta más orgullosa de pertenecer a sus tribus. Al no tener que luchar diariamente contra la pobreza, organizan más actos y programas culturales.
- Infraestructuras. Como hemos mencionado antes, los ingresos del juego permiten mejorar las infraestructuras de los asentamientos que albergan a la comunidad. Como resultado, aumenta el poder adquisitivo de los lugareños, lo que se traduce en más tiendas, locales de ocio, restaurantes, etc.
Como puede ver, el número de ventajas es más que suficiente, y todas ellas son significativas.
Contras de los casinos para nativos americanos
Pasemos ahora a las desventajas de estos casinos.
- Corrupción. El desarrollo de los casinos ha incrementado la corrupción entre los líderes de la comunidad. Periódicamente se producen escándalos relacionados con el supuesto mal uso de los ingresos, sobornos, provisión injusta de puestos, y otros.
- Dependencia. Antes, los luchadores por los derechos de la población indígena estadounidense se quejaban de que las tribus conducidas a reservas no podían hacer nada sin la aprobación del gobierno. Ahora hablan de la misma dependencia financiera total de los casinos, que es totalmente contraria a los valores tradicionales que los indígenas han tenido durante siglos.
- Defectos. Los detractores de los casinos argumentan que trabajar en estos establecimientos (por no hablar de jugar en ellos) desarrolla un materialismo excesivo y empuja a los indios al alcoholismo y la drogadicción. También son frecuentes las causas de ludopatía entre los indígenas. Tampoco podemos olvidar que en las comunidades más pobres que no participan en el juego, el alcoholismo es mucho mayor.
- Delitos. Muchas personas también intentan relacionar los casinos con el creciente número de delitos.
En general, tienen argumentos bastante convincentes.
Conclusión
A la mayoría de los casinos indios no les gustan los gobiernos estatales con reservas de los establecimientos de juego. Casi todos los estados se dedican a este negocio, por lo que sus dirigentes tratan de utilizar todos los métodos para luchar contra los competidores pieles rojas.
Ellos están tratando de reducir su capacidad financiera, obligados a pagar impuestos, o incluso sometidos. Algunos pleitos relacionados con este ámbito duran años, y los políticos intentan utilizar este tema antes de cada elección.
Se puede afirmar que los indios que abran sus casinos no estarán solos en los próximos años.